El 75 por ciento de las tierras de los ejidatarios ya han sido vendidas a grandes empresas ante la falta de apoyos de la Federación y el crecimiento de la mancha urbana en Torreón.
Así lo dio a conocer el secretario de Medio Ambiente de la Confederación Nacional Campesina (CNC) en este municipio, al indicar que el resto de los trabajadores del campo siguen en la actividad “por amor a la profesión, pero con todas las carencias y necesidades posibles”.
Tal situación, expuso Alfonso Orona, ha propiciado que la siembra y el cultivo en La Laguna ya no sean característicos, pues los ejidatarios optan por ofertar sus propiedades, así como los derechos del agua y a costos muy bajos.
“Aquí era la cuna del reparto agrario y no se vendieron por gusto, simplemente no pudieron con el capitalismo y el crecimiento de las grandes empresas agrícolas, los fueron consumiendo, porque la gente no tenía tractores y semillas, y con la tierra y el agua no es suficiente”, explicó.
En 2009 más del 90 por ciento de las tierras eran rentadas, por las misma dificultades.
Comentó que con la aportación de certezas jurídicas, también los propietarios recibieron mayores facilidades de poder vender lo que puso en riesgo las 300 hectáreas que existían en Torreón.
“Aquí específicamente se dio ese fenómeno porque la mancha urbana también creció y también las tierras de los campesinos sirvieron para que hoy existan grandes empresas, universidades y todo tipo de infraestructuras de desarrollo”, señaló.
Al respecto, afirmó que se han cambiado las costumbres y actividades laborales del campo por acciones a las que se adaptaron para ya formar parte de la ciudad.
Por ello, pidió al Gobierno federal “accesibilidad” y “adelgazar la burocracia” en los programas de apoyo, pues según expresó el secretario de Medio Ambiente, resultan inalcanzables.
Torreón,. Coah.
Así lo dio a conocer el secretario de Medio Ambiente de la Confederación Nacional Campesina (CNC) en este municipio, al indicar que el resto de los trabajadores del campo siguen en la actividad “por amor a la profesión, pero con todas las carencias y necesidades posibles”.
Tal situación, expuso Alfonso Orona, ha propiciado que la siembra y el cultivo en La Laguna ya no sean característicos, pues los ejidatarios optan por ofertar sus propiedades, así como los derechos del agua y a costos muy bajos.
“Aquí era la cuna del reparto agrario y no se vendieron por gusto, simplemente no pudieron con el capitalismo y el crecimiento de las grandes empresas agrícolas, los fueron consumiendo, porque la gente no tenía tractores y semillas, y con la tierra y el agua no es suficiente”, explicó.
En 2009 más del 90 por ciento de las tierras eran rentadas, por las misma dificultades.
Comentó que con la aportación de certezas jurídicas, también los propietarios recibieron mayores facilidades de poder vender lo que puso en riesgo las 300 hectáreas que existían en Torreón.
“Aquí específicamente se dio ese fenómeno porque la mancha urbana también creció y también las tierras de los campesinos sirvieron para que hoy existan grandes empresas, universidades y todo tipo de infraestructuras de desarrollo”, señaló.
Al respecto, afirmó que se han cambiado las costumbres y actividades laborales del campo por acciones a las que se adaptaron para ya formar parte de la ciudad.
Por ello, pidió al Gobierno federal “accesibilidad” y “adelgazar la burocracia” en los programas de apoyo, pues según expresó el secretario de Medio Ambiente, resultan inalcanzables.
Torreón,. Coah.
No hay comentarios:
Publicar un comentario