La explotación inmoderada de piedra del afluente data de hace 25 años cuando empresas como Triturados de Piedras Negras, la Ribereña y Ballesteron empezaron a introducir maquinaria pesada extrayendo cerca de 100 millones de metros cúbicos de material.
La organización ambientalista “Amigos del río San Rodrigo”, presentó el pasado lunes una denuncia contra la empresa CAMSA ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente por extracción clandestina de piedra de dicho afluente.
El presidente del grupo reconocido por Profepa como vigilantes ambientales, Waldo Terry Carrillo, mencionó que dicha compañía, la cual construye la ampliación de la carretera Acuña-Piedras Negras, hizo una extracción de 150 metros cúbicos de piedra.
La explotación inmoderada de piedra del afluente data de hace 25 años cuando empresas como Triturados de Piedras Negras, la Ribereña y Ballesteron empezaron a introducir maquinaria pesada extrayendo cerca de 100 millones de metros cúbicos de material.
Con esto, expuso el entrevistado, se han dejado daños en una amplia extensión lo que también ha ocasionado severas crecidas del río San Rodrigo que confluye en el Escondido y San Antonio hacia el Bravo.
“Lo que detenía las corrientes era árboles y piedras, antes el agua era cristalina aunque creciera el cauce y ahora viene como chocolate por que arrastra el suelo y causa mas erosión agravando el problema, por ello insisto en la restauración del ecosistema” explicó.
Señaló además que fuera de los cauces federales, existe la responsabilidad del Estado de vigilar y regular los daños ocasionados a través de “tajos” para extraer piedra de manera clandestina y de lo cual la Secretaria del Medio Ambiente de Coahuila ha hecho caso omiso.
“Hay pozos de 15 metros cúbicos de profundidad que dañan el ecosistema y ocasionan una deformación total del paisaje rural”.
Enfatizó necesario el apoyo de los ciudadanos a través de denuncias para detener esta práctica y exigir resarcir el daño.
Piedras Negras, Coah.
La organización ambientalista “Amigos del río San Rodrigo”, presentó el pasado lunes una denuncia contra la empresa CAMSA ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente por extracción clandestina de piedra de dicho afluente.
El presidente del grupo reconocido por Profepa como vigilantes ambientales, Waldo Terry Carrillo, mencionó que dicha compañía, la cual construye la ampliación de la carretera Acuña-Piedras Negras, hizo una extracción de 150 metros cúbicos de piedra.
La explotación inmoderada de piedra del afluente data de hace 25 años cuando empresas como Triturados de Piedras Negras, la Ribereña y Ballesteron empezaron a introducir maquinaria pesada extrayendo cerca de 100 millones de metros cúbicos de material.
Con esto, expuso el entrevistado, se han dejado daños en una amplia extensión lo que también ha ocasionado severas crecidas del río San Rodrigo que confluye en el Escondido y San Antonio hacia el Bravo.
“Lo que detenía las corrientes era árboles y piedras, antes el agua era cristalina aunque creciera el cauce y ahora viene como chocolate por que arrastra el suelo y causa mas erosión agravando el problema, por ello insisto en la restauración del ecosistema” explicó.
Señaló además que fuera de los cauces federales, existe la responsabilidad del Estado de vigilar y regular los daños ocasionados a través de “tajos” para extraer piedra de manera clandestina y de lo cual la Secretaria del Medio Ambiente de Coahuila ha hecho caso omiso.
“Hay pozos de 15 metros cúbicos de profundidad que dañan el ecosistema y ocasionan una deformación total del paisaje rural”.
Enfatizó necesario el apoyo de los ciudadanos a través de denuncias para detener esta práctica y exigir resarcir el daño.
Piedras Negras, Coah.
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